El sismo, de magnitud 5,4, ocurrió este 15 de noviembre en la parte sureste de la República de Corea, país que se considera relativamente seguro desde el punto de vista sísmico. El foco del fenómeno se encontraba cerca de la ciudad de Pohang, a una profundidad de 10 kilómetros. El temblor provocó heridos y daños materiales, informa Yonhap.

El terremoto se percibió también en Seúl, la capital de Corea del Sur, ubicada a unos 300 kilómetros del epicentro.
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© AFP 2017/ Yonhap

​El fenómeno natural causó 14 heridos, la mayoría de ellos con heridas leves. Sin embargo, una anciana permanece en estado grave tras sufrir el impacto de los escombros de un muro que se derrumbó. Hasta ahora no ha habido informes sobre las víctimas mortales ni los indicios de daños a las instalaciones nucleares que se ubican en el área.


​El terremoto tuvo lugar a las 14.43 hora local -05.43 GMT- y le siguieron varias réplicas de una magnitud de entre 2,4 y 4,6 puntos en la escala de Richter. Numerosos edificios en Pohang resultaron dañados por el sismo, incluida la estación de tren de alta velocidad KTX, que fue cerrada después de que colapsara su techo.


Sismo muy poco frecuente

El terremoto del 15 de noviembre ha sido calificado por el momento como el segundo más fuerte desde 1978, cuando Corea del Sur comenzó el monitoreo de la actividad sísmica. El terremoto más fuerte, de magnitud 5,8, tuvo lugar en 2016 y sacudió Gyeongju, al sur de Pohang.


Los daños causados por el temblor más reciente han sido mayores en comparación con el del año pasado. Esto se debe al hecho de que el epicentro del sismo del día 15 se encontraba más cerca de la superficie.

Las autoridades avisan de que existe la posibilidad de que haya nuevas réplicas que pueden ocurrir a lo largo de los próximos meses.