Se trató de la fusión de dos torbellinos que arrasaron con casas, tinacos, la infraestructura eléctrica y animales en la comunidad de Rancho Alegre, en el municipio mexiquense de Jiquipilco.
Afondo Edomex.
© Afondo Edomex
En cinco minutos 50 viviendas de la comunidad de Rancho Alegre, en el municipio de Jiquipilco al norte del Estado de México, fueron dañadas por la fuerza de un tornado que además se llevó tinacos, a algunos de sus animales y la infraestructura eléctrica del pueblo.
"Me comentan que como 5:20 de la tarde fue cuando inició, de hecho 10, 15 minutos antes comentaron que se estaba incendiando la parte de acá y de ahí empezó a levantarse mucho polvo y empezó a dar vueltas lo que fue la comunidad de Buenos Aires hasta llegar a esta dirección, pero fue muy rápido... No, no, aquí no, si habían pasado así este como les llamamos aquí remolinos, vientos que traen así fuerza también, pero como este no", señaló Sarahí Gil Simón, una de las afectadas.

Algunos habitantes fueron sorprendidos por el fenómeno en la calle, donde apenas lograron refugiarse. Luego corrieron a ayudar a apagar las llamas en una casa donde murió un perro.
"Estaba aquí en el templo, estaba ahí ayudándole a mi papá y a mis tíos... Yo veía pura tierra porque me entró a los ojos", agregó Aarón Gil Almazán, otro afectado.
El tornado que arrasó las viviendas y causó temor entre los residentes, fue resultado de la fusión de dos torbellinos, fenómeno que no se había visto en la zona.
"Donde se llama Las Águilas, es una presa, subiendo ahí el tornado empezó a tomar un poco más de fuerza, hay unos terrenos muy grandes ahí y empezó a concentrarse el tornado y se empezó a hacer más amplió, duró unos 10 a 15 minutos ahí en lo que se fortaleció y yo creo por la tierra que hay de los terrenos, se vio muy tenebroso, se escuchaba bastante fuerte, después ya avanzó hacia aquí... Se veía como el aire comenzó a volar todas las láminas, las lonas, las casas se veía como empezaba a haber muchos siniestros", agregó Julio César Piedad, habitante de la zona.
El poblado no tiene luz y hubo daños en 50 viviendas, la telesecundaria y un templo. A pesar de que llegaron militares, los vecinos acusaron que se negaron a ayudarlos y solo dieron rondines, por lo que pidieron ayuda de las autoridades federales y estatales.