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Al menos 6 mil universitarios y 2 mil estudiantes de secundaria protestaron este jueves en Santiago, capital de Chile, por mejoras en la educación pública. Los universitarios lograron entregar una carta al ministro de Educación con sus demandas y advirtieron que de no tener respuesta llamarán a paro nacional el 1 de junio. Los estudiantes de bachillerato fueron reprimidos por la policía, con un saldo de 27 detenidos.

Los universitarios participaron en la marcha convocada por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) y llegaron hasta al Ministerio de Educación, a pocos metros del Palacio de lLa Moneda.

Allí entregaron una carta dirigida al ministro Joaquín Lavín para manifestar su rechazo ante las medidas anunciadas por el presidente, Sebastián Piñera, en su discurso de cuenta pública ante el Congreso, el pasado 21 de mayo.

Piñera anunció que impulsará un proyecto de ley para crear una Subsecretaría de Educación Superior y propuso un "nuevo trato con las universidades del Estado" para otorgarles más responsabilidades para mejorar su gestión y competitividad.

También se comprometió a perfeccionar los mecanismos de financiación, a reprogramar la deuda de los 100 mil estudiantes morosos y a dar más becas a la excelencia.

"El Ministro tenía una carta de respuesta de vuelta en la que los llamaba a dialogar (...) pero los estudiantes no se van a sentar a dialogar hasta que se pronuncie respecto a las demandas que ya han hecho (porque aseguran que) durante muchos años los ministerios llaman a los estudianets a dialogar pero finalmente no se cumple lo que se acuerda, siguen con su agenda", reportó la corresponsal de teleSUR en Chile, Beatriz Miche.

La periodista agregó que los manifestantes "le dieron un plazo hasta el próximo martes 31 de junio a ver si van a paro o no, hay un paro de estudiantes que podría convertirse en indefinido en caso de que no les respondan".

Propuestas estudiantiles

La presidenta de la Confech, Camila Vallejo, consideró este jueves que es "necesario regular a las universidades privadas y permitirles más flexibilidad a los planteles estatales para que se puedan desarrollar".

Los universitarios también proponen "un mecanismo de acceso universitario con equidad" y una reestructuración de las becas para que cubran el arancel (matrícula) total de los grupos más pobres.

De forma paralela, cerca de 2 mil jóvenes de la educación secundaria se congregaron esta jornada en los alrededores de la céntrica Plaza Italia, en Santiago, donde fueron reprimidos por los carabineros con el argumento de que no tenían permiso para marchar.

En otras ciudades del país, como Valparaíso y Concepción (centro), se repitieron las protestas, en las que se han producido hasta el momento 27 detenciones, según los carabineros.

Panaroma sombrío

Las universidades públicas chilenas no son gratuitas y conviven con una amplia gama de instituciones privadas. Se accede a ellas a través de una prueba de selección anual, mientras que el pago de sus aranceles se puede hacer a través de becas (en el menor de los casos) o créditos con aval del Estado.

Chile tiene hoy casi un millón de estudiantes universitarios.

Los escolares, en tanto, rechazan una ley general de educación aprobada en el Congreso y piden un mayor aporte del Estado a la educación pública.

En Chile, el 10 por ciento de los estudiantes asiste a colegios privados, el 40 por ciento a municipales y el resto a colegio mixtos, en los que los padres y el Estado pagan en conjunto.

Ante esta situación, Vallejo afirmó a la víspera que "el sistema educativo es injusto, perverso y finalmente es una estafa. No queremos más negociado en la educación superior, no queremos más mercaderes de la educación", denunció