Las inundaciones y deslaves provocados por las lluvias torrenciales en poblaciones al este de Tokio causaron al menos 10 muertos y aumentaron los daños en áreas que aún no se habían recuperado por completo de tifones recientes, dijeron las autoridades el sábado.
Japan Ground Self-Defense Force at a landslide site in Chiba City.
© Ministry of Defense JapanFuerza de Autodefensa Terrestre de Japón en la zona del deslizamiento de tierra en la ciudad de Chiba.
Los rescatistas hallaron el cadáver de una persona que desapareció en la prefectura de Chiba cuando se vio sorprendida por la crecida mientras conducía su coche. Otra fue reportada como desaparecida en Fukushima, más al norte, que todavía se recupera de la devastación causada por el tifón Hagibis a principios de mes.


Nueve de las víctimas mortales se registraron en Chiba y la otra en Fukushima.

Aunque las lluvias ya pasaron y el nivel del agua ha descendido, todavía hay zonas inundadas. Unas 4.700 viviendas carecen de suministro agua y algunos servicios ferroviarios están suspendidos o sufren demoras.

En el distrito de Midori, en Chiba, los deslaves aplastaron tres casas y mataron a tres personas que quedaron sepultadas debajo. Otro deslave golpeó una vivienda en la cercana ciudad de Ichihara y mató a una mujer. En Narata y Chonan, tres conductores se ahogaron cuando sus vehículos quedaron sumergidos en la crecida.
"Hubo un ruido y un impacto enormes, un 'boom' como el de un terremoto, así que salí", contó un residente que vivía cerca de una de las casas aplastadas en Midori. "La lluvia era aún más intensa que la de los tifones".
En Fukushima, una mujer fue hallada muerta en un parque en la ciudad de Soma tras reportarse que un auto fue arrastrado por la crecida. Un pasajero del vehículo sigue desaparecido.

Las tormentas obligaron a cancelar el viernes la segunda ronda del primer torneo de la Gira de la PGA que se celebra en Japón, el Zozo Championship, en Inzai.

El primer ministro, Shinzo Abe, participó en una reunión de los equipos de emergencia el sábado en la mañana y pidió "todo el esfuerzo posible en las operaciones de rescate y ayuda". Además pidió que se reparen cuanto antes servicios esenciales como electricidad y agua, entre otros, para que los afectados puedan volver a sus vidas.

Según la oficina de Abe, en solo medio día el viernes cayó el promedio de precipitaciones de todo el mes.

Las lluvias estuvieron causadas por un sistema de bajas presiones que se situó sobre la principal isla de Japón, Honshu, y avanzó hacia el norte el viernes por la noche. La mayoría de las 6.000 casas que se quedaron sin luz en Chiba, volvían a tener servicio el sábado.

Hace dos semanas, el tifón Hagibis provocó inundaciones generalizadas y dejó más de 80 personas muertas, o que se presume que fallecieron, en el país.