Imagen
© Desconocido
El líder de Taiwán supervisó el sábado la destrucción de 2,3 toneladas de bebidas que habrían estado contaminadas con un peligroso químico.

El presidente Ma Ying-jeou hizo un llamado a los fabricantes a mejorar la seguridad alimenticia después de que los productos fueron tirados en una planta de tratamiento de desechos.

Las autoridades inspeccionaron 16.000 tiendas durante el mes pasado y retiraron las bebidas, tes y suplementos de salud que contenían DEHP, un plastificador agregado para mejorar el color y la textura. Las autoridades dicen que grandes cantidades de DEHP podrían causar futuros problemas reproductivos a los varones.

No ha habido reportes confirmados sobre efectos adversos de los alimentos. Sin embargo, China y una decena de países han prohibido una larga lista de productos taiwaneses que se teme estén contaminados.