Las autoridades colombianas investigan la explosión el sábado 18 de junio de un coche bomba que provocó 17 heridos.

Los hechos tuvieron lugar al sudoeste del país, donde la policía halló un artefacto explosivo en un vehículo. Cuando trató de desactivar la bomba, esta fue detonada a distancia causando heridas a 17 personas (entre ellos dos menores y tres agentes), dañando 15 viviendas y dejando a 15 barrios sin suministro eléctrico.

Los agentes lograron arrestar al conductor del automóvil, que dijo pertenecer al movimiento guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) y confesó haber sido contactado por guerrilleros para trasladar la carga explosiva hasta el centro de Popayán.

La Policía de Colombia relaciona el atentado con la llegada de grupos encargados de erradicar cultivos ilícitos en el departamento del Cauca.

Las fuerzas colombianas están llevando a cabo una operación de seguridad por tierra y aire para buscar a los responsables del acto terrorista y prevenir otros atentados contra la población.

El comandante general de las Fuerzas Militares, el almirante Edgar Cely, ofrece una recompensa de casi 160.000 dólares por información sobre Ovidio Antonio Parra Cortes, alias 'EL Tío', cabecilla del ELN en el Departamento del Cauca y presunto responsable de la explosión.

Cely además ordenó incrementar la vigilancia en las carreteras del sur del país para evitar otros posibles atentados.