
Los manifestantes portaban pancartas y lanzaron consignas pidiendo la renuncia del presidente, del vicepresidente y de todo el Gabinete de Gobierno.
Al final de este sábado, medios locales reportan represión por parte de la Policía y varios detenidos en las cercanías de la Casa Presidencial en la ciudad de La Asunción.
A diferencia de la movilización del viernes, que dejó al menos un muerto y ocho heridos, esta nueva concentración no fue reprimida por las fuerzas de seguridad, por lo que los manifestantes marcharon en completa tranquilidad.
Durante la movilización, los asistentes portaban pancartas y lanzaron consignas pidiendo la renuncia del presidente, del vicepresidente, Hugo Velázquez, y de todo el Gabinete del actual Gobierno.
Mientras transcurría la movilización, el presidente anunciaba cambios en su Gabinete para tratar de descomprimir la crisis y hacer ver a los paraguayos que escuchaba sus reclamos.
Sin embargo, los asistentes marcharon ajenos a los cambios prometidos por el mandatario, que dejan fuera al jefe del Gabinete Civil, Juan Ernesto Villamayor, a la ministra de la Mujer, Nilda Romero, y al ministro de Educación, Eduardo Petta.
Este sábado los líderes de los principales partidos de oposición expresaron su apoyo a las movilizaciones en contra del presidente Abdo Benítez.
También indicaron que la salida a la crisis política que vive el país es que el presidente y el vicepresidente dejen de ser parte del Gobierno por vía de la renuncia o a través de un juicio político.
Para muchos paraguayos, muchos de los males que arrastra el país, como la corrupción, la falta de desarrollo o las carencias en educación y sanidad, son producto de las décadas de gobiernos colorados desde la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989).