Desde 2002 que el euro, moneda unificada de la Unión Europea, no sufría una reducción de su valor ante el dólar tan fuerte como la que experimentó este martes 5 de julio, al cambiarse por 1,025 billetes estadounidenses en el mercado de divisas.
Euro
© AP Photo / Michael Probst
Las sanciones con que Europa busca contener a Rusia y recriminar su operación militar especial en Ucrania han generado incertidumbre y riesgos ante un posible corte del suministro de gas ruso al continente.

Así, los inversionistas vaticinan que la situación orillará al Banco Central Europeo (BCE) a ralentizar el aumento de tipos de interés por el temor de una posible recesión.

Este escenario también podría conducir a una depreciación más pronunciada del euro frente al dólar, en un panorama, además, donde se busca contener la inflación con políticas monetarias agresivas de parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.

En los últimos 12 meses el euro ha perdido un 13% de su valor y un 9% en lo que va de lo del 2022.


El BCE tiene que equilibrar entre subir tipos de interés para frenar la inflación o ir más lenta en esas intenciones a pesar de un riesgo de que la economía entre en una dinámica de subidas de precios y de salarios, evalúa el reportero Álvaro Sánchez para El País.

Los exportadores de Europa son competitivos porque venden sus productos más barato que algunos rivales, mientras que las multinacionales europeas que reciben dividendos de sus filiales extranjeras obtienen más euros por las mismas ventas, además de los beneficios en el turismo de mantener una oferta barata.

Sin embargo, un euro emparejado con el dólar generará dificultades para turistas europeos que busquen pasear en Estados Unidos.

En la adquisición de energía, transacciones pagadas en dólares, se notará la pérdida de poder adquisito del euro en un escenario donde, además, la crisis de Ucrania ya de por sí ha disparado los precios del petróleo y el gas.

La situación está resultando tan desafiante que incluso ha frenado 30 años de superávits comerciales en Alemania, con dificultades para cubrir el pago del suministro energético.