Se cumplieron las predicciones de los meteorólogos indios: nuevas tormentas con fuertes vientos han sacudido el país asiático y han provocado, por el momento, al menos 86 muertos y un centenar de heridos. Varios estados están en alerta ante la posibilidad de más incidentes en los próximos días.
ADNAN ABIDIREUTERS
© Asna Abidi/ ReutersUn niño corre en mitad de una tormenta de polvo en Nueva Delhi.
El último temporal iniciado en la noche del domingo ha golpeado con fuerza distintos puntos de India, pero sobre todo ha sido mortal en los estados de Uttar Pradesh, Andhra Pradesh, Bengala Occidental y en la capital, Nueva Delhi. Dado que la tormenta se ha mantenido activa en algunos lugares entrado ya el lunes, las autoridades dan por hecho que las cifras de damnificados irán aumentando según lleguen informes desde cada localidad afectada.

La mayoría de víctimas se produjeron tras la caída de árboles y paredes que no resistieron a la fuerza de una tormenta eléctrica que iba acompañada de vientos de hasta 109 kilómetros por hora en algunos puntos como Delhi.


El primer ministro indio, Narendra Modi, lamentó la elevada cifra de afectados. "Triste por la pérdida de vidas debido a las tormentas en varias partes del país. Mis condolencias a las familias que están de luto. Rezo por la pronta recuperación de los heridos", escribió en su cuenta de Twitter.

Hoy las televisiones locales difundían imágenes de la situación en Uttar Pradesh; escenas propias de un huracán en las que se producen fuertes corrientes de aire, la visibilidad es muy reducida y los objetos de menor peso vuelan a merced del viento. A pesar de las advertencias del Departamento Meteorológico de la India, que recomendó a los ciudadanos que se resguardaran en sus viviendas, en las imágenes se puede ver a gente haciendo vida normal en la calle en mitad de la tempestad.

La tormenta también ha afectado a las carreteras, donde se han producido atascos y accidentes de tráfico. En el aeropuerto de Delhi más de 40 vuelos tuvieron que ser desviados a otros destinos. Los servicios de transporte público, como el metro, se vieron suspendidos durante una hora para evitar mayores incidentes.

El Departamento Meteorológico de la India advirtió que las regiones que van desde Cachemira hasta Andhra Pradesh, es decir, prácticamente todo el país de norte a sur, estuviesen preparadas para fenómenos meteorológicos similares durante las próximas 72 horas, ya que se esperan intensas lluvias, fuertes vientos y tormentas eléctricas. Hoy lunes se prevé que en el norte y en el noroeste de la India los vientos alcancen los 70 kilómetros por hora.

Cada año, en la época que precede al monzón, las altas temperaturas unidas a intensos vientos provocan este tipo de fenómenos. En el último mes gran parte del país se ha visto sacudido por temporales de este tipo que arrastran polvo a gran velocidad. A principios de mayo murieron más de un centenar de personas, sobre todo en Uttar Pradesh, a causa de una tormenta con vientos que alcanzaron los 130 kilómetros por hora.