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El ministro ecuatoriano de Salud, David Chiriboga, confirmó que ya ascienden a 23 los fallecidos por alcohol adulterado que contenía metanol, al incorporarse a la lista de víctimas un joven de la provincia costera Guayas.

La gran mayoría de los fallecidos, 20, son de la provincia de Los Ríos, al suroeste del país, donde en uno de sus cantones la semana pasada se celebró una fiesta tradicional y aparentemente se consumió el alcohol adulterado, y otros dos son de la provincia Tungurahua.

Desde el domingo hasta hoy miércoles rige en todo el país la ley seca, y cualquier eventual extensión será decidida en el Comité de Operaciones de Emergencia Nacional aunque continúa la verificación de licores en todos los establecimientos comerciales.

Cantidades considerables de aguardiente artesanal, conocido como "punta", ha sido decomisado y destruido, pero aún no se ha informado el origen de la contaminación con alcohol de madera o metanol que afecta a cinco de las 24 provincias del país.

Las autoridades tienen instrucciones de someter a inmovilización el alcohol a granel que se encuentre en cualquier establecimiento para ser comercializado, el cual se someterá a análisis, y si contiene metanol será decomisado y eliminado.

Al mismo tiempo, se reforzó la coordinación de las provincias fronterizas con la Servicio Aduanero Ecuatoriano (SENAE) para reforzar el control en los puntos de ingreso de productos al país.

Hasta este martes se habían atendido en hospitales del país 153 personas, incluyendo los fallecidos, siete permanecen en cuidados intensivos, y se han decomisado más de cuatro mil 500 litros de alcohol de fabricación artesanal.