Traducido por el equipo de SOTT.net

La agencia de salud pública africana está a punto de declarar la emergencia por viruela símica la semana que viene, afirmando que el ritmo de propagación de la infección vírica es alarmante, ya que una nueva variante atraviesa las fronteras de la República Democrática del Congo.
Monkey pox
© Arlette Bashizi/REUTERSUn hombre recibe tratamiento contra la viruela del mono en el hospital general de Goma tras el aumento de casos en la República Democrática del Congo
La viruela símica se transmite por contacto cercano y causa síntomas parecidos a los de la gripe y lesiones llenas de pus. La mayoría de los casos son leves, pero puede matar.

La nueva variante, conocida como Clade Ib y que circula sobre todo en el Congo, parece propagarse más fácilmente a través del contacto estrecho habitual, como parece ser el caso entre los niños.

El director general de los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC de África), Jean Kaseya, dijo el jueves que los casos notificados en África habían aumentado un 79% entre 2022 y 2023 y un 160% entre 2023 y 2024.

"Este es uno de los aspectos que nos alarma", dijo.

Kaseya añadió que mantendría llamadas con los jefes de la Unión Africana (UA) y de la Comisión de la Unión Africana el martes para "obtener su bendición" y orientación para declarar una emergencia de salud pública, un nuevo poder para el organismo continental. Afirmó que lo más probable es que haga la declaración la semana que viene.

Hacerlo permitiría a los CDC de África coordinar mejor las respuestas transfronterizas y obligaría a los países miembros a notificar los nuevos casos al organismo continental, afirmó.

También permitiría movilizar recursos nacionales e internacionales y acelerar la investigación de vacunas y su desarrollo, afirmó Kaseya, quien añadió que había mantenido conversaciones con ejecutivos del fabricante alemán de medicamentos BioNTech sobre la posibilidad de aumentar la producción de vacunas tras la probable declaración de la próxima semana.


Comentario: A veces estas vacunas son peores que contraer la propia enfermedad, como quedó claro con la artificiosa crisis del coronavirus y la mayoría de las vacunas de acompañamiento desplegadas en Occidente, así como con la poliomielitis derivada de la vacuna que sigue causando brotes.

En algunos casos, son mucho más mortales, y hay una miríada de otras consecuencias "no intencionadas", peligrosas, asociadas al uso de vacunas para estos brotes.

Queda por ver si ese es el caso de la vacuna de la viruela del mono.


Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), África está experimentando este año un aumento de casos sin precedentes.

El Congo ha visto más de 13.000 casos sospechosos de viruela símica incluyendo 503 muertes en lo que va de año, dijo a Reuters el portavoz de la OMS en el Congo, llevando el número total de casos allí desde el inicio de 2023 a cerca de 27.000, con más de 1.000 muertes.

Al este del Congo, Ruanda, Uganda y Kenia, que anteriormente no se habían visto afectadas por la viruela símica, han notificado casos de la nueva variante desde mediados de julio, según un comunicado de la OMS.

"Se necesitan más análisis para comprender mejor los patrones de transmisión y perfeccionar la respuesta al brote", dijo la agencia de la ONU.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. emitieron el miércoles una segunda alerta sanitaria para notificar a médicos y departamentos de salud sobre la nueva cepa mortal.

El jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha prometido convocar un comité de emergencia para debatir si el brote en el Congo representa una emergencia de salud pública de importancia internacional.

El lunes, los CDC africanos dijeron que la Unión Africana les había concedido 10,4 millones de dólares en fondos de emergencia para su respuesta a la viruela símica.