La costa del Golfo de Maine -en el Océano Atlántico- está experimentando cambios drásticos, que están ocasionando que los que anteriormente abundantes mejillones azules salvajes comiencen a extinguirse, según un estudio impulsado por la Universidad de California, Irvine (UCI).
El Golfo, que abarca la costa noreste de Norteamérica, siempre fue muy rico en esta variedad de mejillones y actualmente - según los resultados del estudio publicado en Global Change Biology- arrojan que la población se redujo en un 60% a lo largo de la costa del Golfo.
Los mejillones azules juegan un rol muy importante como filtradores, eliminadores de bacterias y de metales pesados y toxinas del agua. Son una especie fundamental en la comunidad intermareal, que crea hábitats y amplía la biodiversidad con el apoyo de un entorno local.
De acuerdo al profesor Cascade Sorte, participante del estudio, advirtió entonces que su disminución genera una gran preocupación,
ya que esta podría precipitar extinciones de otras especies como "efecto dominó" de la inminente desaparición de los mejillones.
Comentario: No parece un caso extraño el ser atacado por un oso en un bosque plagado de estos úrsidos, pero sorprende la agresividad del animal al volver a buscar al hombre para atacarlo por segunda vez cuando ya no suponía una amenaza.
Ayer mismo, día 3 de octubre, se produjo en el archipiélago Alexander, Alaska, el quinto ataque de un oso en 2 meses. En agosto continuó el incremento de ataques de osos a humanos en Akita, Japón, que ya acumula 4 muertes y decenas de heridos este año. Y sorprendente fue el ataque al que sobrevivió un agricultor hace un mes en la India tras pasar 3 horas luchando contra el animal.
A continuación otros ataques de osos de los últimos meses:
Ataques de elefantes, lobos, leones marinos, hienas, leopardos, camellos, osos, canguros, nutrias, focas, castores, hipopótamos, linces, pumas, coyotes, chimpancés, babuinos, jabalíes, monos, vacas y perros. (¡¡¡Y algunas especies más!!!)