A fines de mayo la revista científica PeerJ publicó el estudio final sobre la muerte de 367 ballenas en el sur de Chile, la mayoría del tipo sei (Balaenoptera borealis), uno de los mayores varamientos a nivel mundial. Según la investigación, liderada por Vreni Häussermann, el evento estuvo relacionado con la proliferación de algas tóxicas durante el fenómeno de El Niño, es la hipótesis más fuerte hasta ahora.
Häussermann, investigadora de la Fundación Huinay, sigue con los estudios en la zona y organizó este año una expedición con la cooperación de la fundaciones Blue Marine y Meri, con el fin de estudiar la población de las ballenas sei en el Golfo de Penas y el parque nacional Laguna San Rafael, a bordo del velero Saoirse-HF38, que recorrió más de 1.450 km.
"Durante esta expedición se encontraron 18 cadáveres no previamente registrados. Ocho de ellos vararon entre mayo de 2016 y mayo de 2017. Desafortunadamente, no existen datos previos de estudios poblacionales y de mortalidad de las poblaciones de ballenas de esta localidad, excluyendo la mortalidad masiva de 2015 y las expediciones realizadas en 2016", señala el reporte científico entregado a Häussermann la semana pasada.
Comentario: Con tantos volcanes en erupción recientemente, una comparable intensificación en actividad de sus homólogos bajo el agua parece lógica. Se estima que hay hasta un millón de volcanes submarinos en nuestro planeta.
Los efectos de esta actividad volcánica, junto con una mayor emisión de gases metano y la radiación del desastre de Fukushima, probablemente estén creando unas 'condiciones ambientales anormales' que contribuyen a esta devastadora mortandad masiva de peces.