Comentario: Como complemento a este artículo los invitamos a la lectura del siguiente artículo:
Guerras, pestes y brujas
Durante años me he preguntado cuál sería el impacto social (inclusive económico) de que el ser humano racionalice, acepte y asimile que existe realmente vida extraterrestre. Generalmente nos imaginamos ese día como la llegada de una civilización mucho más avanzada que nosotros que domina los viajes interplanetarios a velocidades mayores que la luz, vestidos con extraños uniformes en naves redondas del tamaño de ciudades enteras que "vienen en paz".
Hay una ligera posibilidad que estemos cerca del día en que el mundo se de cuenta que la vida extraterrestre existe, pero será muy diferente a esas historias fantásticas que hemos imaginado por años (cortesía del cine y los ufólogos con mucha imaginación). Ese día llegaría por algo que sucedió en la India del 25 de julio al 23 de septiembre de 2001: lluvia de color rojo. Inicialmente se creía que era agua mezclada con arena u hongos, pero cuando Godfrey Louis, (físico en la Universidad de Cochin de Ciencia y Tecnología) hizo un análisis más de cerca, se encontró con células rojas que tenían un notable parecido con los microbios de la Tierra, pero sin ADN (lo cual inmediatamente descartaba la mayoría de las celulas biológicas conocidas).