La ola de frío que desde inicios de noviembre afecta gran parte del centro y norte de Europa ha puesto en alerta al continente, con la cancelación de cientos de vuelos y el cierre de escuelas, rutas y puertos marítimos, principalmente en Gran Bretaña, Francia y Alemania a causa de las intensas nevadas.

Hasta ahora las gruesas capas de nieve han causado la cancelación de 255 vuelos en el aeropuerto de Frankfurt (Alemania), medida que fue repetida en el de Newcastle (centro este) y otros del Reino Unido, que han estado cerrados varias horas.

El este del continente también está afectado. Polonia y buena parte de la República Checa están sufriendo las primeras nevadas importantes de la temporada, que han provocado serios problemas en las carreteras, al igual que el norte de Portugal.

Por su parte, en España, las fuertes ráfagas de viento han hecho que se decrete alerta naranja y amarilla en aproximadamente 29 provincias, a su vez, los organismos gubernamentales aseguraron que el mal tiempo se extenderá por toda la península.

El frío intenso hizo que en Gran Bretaña el uso de energía registrara el máximo en 22 meses, con un gran número de viviendas que recurrieron al gas natural y la electricidad para calentar sus hogares.

Temperaturas récords

Según organismos meteorólogicos europeos, las bajas temperaturas registradas en los últimos días han sido las más intensas en la historia de Francia, España, Suiza, Suecia y aún más en Gran Bretaña, donde en esta época del año no nevaba.

En el Reino Unido, la nieve llegó a cubrir con capas de 2 a 5 centímetros de espesor, razón por la que el aeropuerto de Edimburgo, en Escocia (norte), ha tenido que clausurar sus operaciones en varias ocasiones.

Del mismo modo, en Londres, el aeropuerto de City también registró retrasos y anulaciones.

En relación a cifras climáticas, fuentes oficiales indicaron que en España la temperatura alcanzó los -10°C mientras que en Italia la ola de frío golpeó el norte del país y las regiones montañosas (-10°C en Aosta, -4°C en Bolzano).

Por otro lado, en Francia, se registró una temperatura de -15,3°C en Orléans (centro), mientras que Mouthe, al este del país, se superaron los -22°C, frío que no se alcanzaba desde 1971.

En Holanda y Suiza la situación fue similar, con temperaturas de -8°C y -13,9°C respectivamente que tenían más de 60 años sin alcanzarse.

Sólo Grecia se ha salvado de padecer frío, con una temperatura promedio que supera los 20°C en Atenas, la capital del país.